Un cuervo estaba en lo alto de un árbol saboreando un delicioso pedazo de queso, cuando de pronto una zorra, que había llegado hasta allí porque había sentido el aroma del preciado alimento, le dijo:
-¿Cómo se anda estimado cuervo? He venido hasta para contemplar de cerca su bello plumaje que a lo lejos despertó mi admiración. Quiero decirle que si canta de la misma forma en que luce, es usted una perfecta criatura.
No adaptado a ser lisonjeado, pues siempre había sido un ave asociada a la mala fortuna, el cuervo se dejó seducir por el halago de la zorra. Creyó que su atención bien merecía complacerlo con un canto, por lo que abrió el pico para cantar, dejando caer el trozo de queso hasta el suelo, donde espera rapazmente la zorra.
Al tener el queso en su poder, esta empezó a reírse y le dijo:
-Escúcheme amigo, su inocencia merece que le dé un consejo: nunca se deje embelesar ante el mínimo halago o lisonja. Trate de ver siempre más allá. Este consejo delo por pagado con el sabroso pedazo de queso que me ha cedido, al final la verdadera causa de haber venido hasta aquí.
Dicho esto la zorra se marchó y el cuervo se sintió molesto y lleno de vergüenza. Juró que no sería engañado tan fácilmente nunca más.
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Buenisimas las fabulas. Tienes que hacer juveniles para 13 o 14 años por favor, te lo pido con todo mi corazón.
Hola Mumi, muchas de nuestras fábulas son adecuadas para todas las edades 🙂
Son muy buenas las fábulas mil respetos para usted le agradezco por las fábulas
Muchisimas gracias yo todas las noches les leo cuentos y fabulas a mis nietos a ellos les encantan 😍😍
Muy bonitas fábulas,pero podrían poner las moralejas??